Elevar al 100% del salario mínimo legal para las trabajadoras domésticas va a generar el aumento de la economía en negro, advierte el economista Ricardo Rodríguez Silvero. Mientras para el economista Amilcar Ferreira, el pago por horas es también una alternativa.

Luego de la ratificación de la Cámara de Senadores, en su versión del proyecto que modifica la Ley del Trabajo Doméstico, para que este sector perciba el 100% del salario mínimo (G. 2.112.562), se dividieron las posturas de quienes contratan este servicio. “(…) va a expandirse la informalidad en la remuneración a las empleadas domésticas, porque una gran parte y probablemente la mayoría de los hogares del país no van a estar en condiciones de pagar el salario mínimo legal, por lo menos si ese pago es igual a la remuneración monetaria”, opinó Rodríguez Silvero.

Ahora bien, si se equipara ese pago al equivalente, de por ejemplo la comida, la utilización de los servicios básicos de la casa, y si es cama adentro el equivalente a un minialquiler, entonces ya va a depender de la reglamentación que se haga de esa ley con el Decreto del Ejecutivo, comentó. “(…) pretender equiparar al salario mínimo legal también la remuneración monetaria a las empleadas y los empleados domésticos, va a aumentar sustancialmente la informalidad”, añadió el economista.

Dijo que lo que pretende ser una ayuda social a las trabajadoras domésticas puede convertirse en algo contraproducente.

“Creo que el encarecimiento artificial de los empleados domésticos vía aumento de salario mínimo legal va a ser contraproducente porque; primero, los hogares en su gran mayoría no van a estar en condiciones de pagar eso; segundo, porque eso puede aumentar el desempleo de los empleados domésticos, y tercero, porque va a ocasionar dificultades adicionales con el pago de los servicios sociales”, argumentó. “Los diputados y senadores harían bien en encontrar una fórmula intermedia para ese propósito tan loable que es asegurar mejor remuneración a las trabajadoras domésticas”, finalizó.

A FAVOR. Por su parte, el analista económico Amílcar Ferreira dijo estar de acuerdo con que se pague el salario mínimo a las trabajadoras domésticas. Considera que el pago por hora es otra propuesta para ajustarse a la normativa, para aquellas personas que no puedan pagar el salario mínimo.

“En mi experiencia, cuando viví en el extranjero, he visto que en la medida en que van mejorando las condiciones del país y en la medida en que también los salarios se van actualizando podría ocurrir eso que hoy se menciona como una crítica, de que cierto sector de la población no va a poder pagar una empleada doméstica si es que el salario es el mínimo, entonces ante eso lo que se da es una contratación por hora”, indicó Ferreira a Última Hora.