Julio González, conductor radial de Prensa 5 Radio.

«Chorro» es un término coloquial con la que designan a un ladrón en la Argentina, este giro propio chorro trascendió las fronteras del país austral y llegó al nuestro.

 

 

 

 

Los «moto-asaltantes», se convirtieron en motochorros en las calles y por extensión y la manera agresiva de actuar en el terror de la población de nuestro país y con mayor ímpetu en la capital.

 

 

Detallar los casos puntuales de Robo Agravado como los carátula el Ministerio Público nos llevaría más tinta y papel de lo deseado, los que por ventura son detenidos al poco rato ya están de vuelta en las calles listo para cometer sus desaguisados.

 

 

El sistema policial – fiscal – judicial son un poroto para meter en cintura y mantener a raya a los amigos de lo ajeno. El sistema penitenciario Paraguayo en vez de colaborar en reformas a los reclusos para su posterior reinserción a la sociedad los capacita más aún en la delincuencia como si de un instituto de curso rápido se tratara.

 

 

Lo doloroso es la impunidad creciente en nuestro pais. Antes de olvidar estan los otros chorros los que no necesitan de motos para apropiarse de lo que no les pertenece.

 

 

Vocación no les falta a uno ni otro salvo que estos últimos citados tienen una especie de salvoconducto para delinquir libre y alegremente; seguir engrosando la billetera y la cuenta en algún lugar del planeta.

 

 

Algunos ocupan altos cargos y fingen en sus ratos libres ser esposos, padres, lo que se dice ciudadanos ejemplares, algunos según los rumores hasta creen que son ejemplares. Pero eso ya es una mala jugada de la mente, mientras escribía estas lineas me interpela la dura incógnita será que van a poner el estate quieto alguna vez a estos inescrupulosos?

 

 

Y me guardó bien en responderme a mi mismo…no hay peor mentira que el engañarse a si mismo mientras voy a llamar al 911 noooooo ahí noooooooo….